En una tarde de el mes de Noviembre
En pleno Otoño
Salí como era mi costumbre
Pues
Todas las tardes salía,sobre todo cuando arreciaban los Vientos y las Tormentas
No había vehículos que circularan
Nadie había
En el suelo,en un prado pequeño humedecido por la lluvia y olvidado del hormigón
Vi algo que me llamó la atención
Desde mi altura
¡No lo veía bien¡
Me agaché y vi a una débil semilla que hacía esfuerzos para hincar sus raíces en la Tierra
Me quedé observándola y vi que a pesar de sus esfuerzos no conseguía hincar sus raíces
La semilla con voz tímida y empapada por la lluvia me dijo.-¡Ayúdame¡....¡Plántame.¿Y dónde?
Le pregunté yo
.-¡No sé¡...dijo la semilla.....-¡Date prisa porque me estoy muriendo¡
Sin saber qué hacer cogí a la semilla la calenté con mi aliento y con mis manos y la metí en el bolsillo de mi abrigo
De vez en cuando abría el bolsillo y veía que con el calor se iba recuperando
Seguí caminando contento de tener una semilla en mi bolsillo
¿De qué será esta semilla?
Me preguntaba
Y al notar la semilla que me hacia preguntas sobre ella me dijo
.-¡Soy hija de los árboles¡
.-¡Árboles frondosos¡
Y le dije
.-¡Tengo una idea¡
.-Te llevaré al bosque y allí estarás junto a los otros árboles
Y la semilla me contestó
.-¡No me lleves al bosque,hay demasiados árboles y no crecería bien
.-¡Plántame en la cima de la más alta montaña¡
Y obedecía a la petición de la semilla
La planté en la cima de la montaña más alta de las montañas
Nevaba
¡No era,desde luego el tiempo para plantar semillas¡
Pero
Como ella así lo había querido
La planté
Excavé la Tierra escarchada y debajo de la escarcha la Tierra estaba caliente
La arropé
Y cumplido su deseo me fui
Cada mes iba a la montaña para ver el crecimiento de mi semilla
Después de años y años mi semilla se convirtió en un árbol de tronco fuerte y retorcido y muy frondoso
Y en sus ramas anidaban las águilas
Soportaba bien los fríos,los rayos y las tormentas
Yo fui envejeciendo
Pero
A pesar de todo subía todas las tardes a la montaña para ver mi árbol
Y una tarde de verano a la sombra de mi árbol
Contemplando el Sol y la Mar
Y acurrucado en el regazo de aquella semilla que se convirtió en mi árbol
¡Me hizo una visita la Muerte¡
Rafael Carmona Jiménez
Día veinte y tres de el mes de Febrero
Y de el Año 2014
Eran las nueve y cuarto de la Mañana
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