SIEMPRE ME HA GUSTADO PASEAR POR LA CIUDAD,CUANDO TODO ESTÁ DORMIDO.TODO DUERME,PERO YO ESTOY DESPIERTO.DESPIERTO EN EL SUEÑO.EL CORAZÓN DE LA CIUDAD LATE APRESURADAMENTE EN UN SUEÑO FATIGADO Y EN CADA EDIFICIO VUELAN COMO MURCIÉLAGOS NEGROS LAS PESADILLAS.PERO TODA LA CIUDAD NO ESTÁ DORMIDA.EN MIS PASEOS NOCTÁMBULOS,A VECES, HE ENCONTRADO HECHOS INSÓLITOS.LO INSÓLITO ES,SI ES COMPRENDIDO UN PEQUEÑO PLACER.QUIZÁS HAGA ALGUNOS AÑOS PERO LO RECUERDO CON LUCIDEZ.
LOS PULPOS DE LA NOCHE ABRAZABAN CON SUS TENTÁCULOS LA CIUDAD Y LAS MEDUSAS AZULES CIRCULABAN POR EL CIELO.
UN VIENTO FRÍO BARRÍA LA CALLE ARRASTRANDO LATAS Y PAPELES Y LO ZARANDEABA TODO A SU PASO.
RECOGIDO EN UN PORTAL VI UN CACHORRO DE PERRO,UN CACHORRO DE PERRO QUE JUNTANDO SUS PATITAS DELANTERAS HUNDÍA SU HOCICO CALENTÁNDOSE CON SU ALIENTO.
EL PERRITO LEVANTÓ SUS OREJAS AL VERME Y SE ACERCO A MÍ.
YO SEGUÍ MI CAMINO PERO EL PERRITO ME SEGUÍA.
EL VIENTO SE CALMÓ.
SALIÓ LA LUNA.
BRILLABAN LAS ESTRELLAS.
LA CIUDAD SEGUÍA DURMIENDO.
LA LUNA VIO AL PERRITO Y SE ACERCÓ TANTO QUE YO MISMO PODÍA TOCAR A LA LUNA.
LA LUNA SE SONREÍA Y AL VER AL PERRITO ABANDONADO HACIÉNDOME UN GUIÑO DE ALIANZA RECOGIÓ AL PERRITO Y LO LLEVÓ JUNTO A LOS DEMÁS PERRITOS QUE ABANDONA LA GENTE.
RAFAEL CARMONA JIMÉNEZ.
DÍA TRECE DE ENERO DEL AÑO 2012.
A LAS ONCE Y CUARTO DE LA MAÑANA.
ESCRIBO SIEMPRE DESDE MACHARAVIAYA
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