- SUS OJOS DE COLOR NEGRO MIRABAN DESDE HACÍA NOCHES EL HORIZONTE ONDULADO POR LAS DUNAS.
- LA BRISA DE DESIERTO ACARICIABA SU ROSTRO PERLADO DE LÁGRIMAS.
- AZUCENA ESPERABA.
- LAS PALMERAS BRONCÍNEAS DEL PATIO PROYECTABAN SU SOMBRA EN LAS SOMBRAS DE LAS COLUMNAS ESPIRALES DE AZABACHE.
- LOS TULES NEGROS CON ENCAJES DE FLORES BLANCAS,DIBUJABAN SU CUERPO.
- ESTÁTICA COMO UNA ESTATUA QUE MIRA LOS HUECOS DE LA NOCHE.
- AZUCENA MIRABA EL HORIZONTE.
- AZUCENA ESPERABA.
- AL PRINCIPIO FUE UNA LÍNEA DE PLATA QUE IBA AVANZANDO EN EL DESIERTO DEL SAHARA.
- SE ALZÓ LA LUNA ILUMINANDO CON GASAS BRILLANTES DE COBRE LOS LEJANOS OASIS.
- SOBRE LA ESFERA DE LA NOCHE MIRÍADAS DE ESTRELLAS BRILLABAN.
- EL AGUA DE LOS SURTIDORES ARRULLABA EL SUEÑO DE LAS FLORES.
- DETRÁS DE LAS CELOSÍAS DECENAS DE OJOS VELADOS,MIRABAN.
- UN CABALLO BLANCO CON LAS CRINES DE PLATA APARECE EN EL HORIZONTE.
- AZUCENA YA NO MIRA.
- AZUCENA YA NO OBSERVA.
- AZUCENA DUERME.
- RAFAEL CARMONA JIMÉNEZ.
- DÍA VEINTE Y DOS DE MAYO DEL AÑO 2012.
- A LAS DIEZ DE LA MAÑANA.
- ESCRIBO SIEMPRE DESDE MACHARAVIAYA
martes, 22 de mayo de 2012
AZUCENA
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