gris mustia
la mañana
aún no ha salido el sol
está la mar en calma
en el estanque
silenciosos peces sus cabezas de escamas levantan
quieran saludarte
a tu belleza
con silbidos prolongados te cantan
igual que los pájaros y las serpientes
.-qué regalarte?
el emocionado poeta
se preguntaba
.-algo que adorne su belleza
se dijo
pero
.-¿qué puede adornar a tu excelsa belleza?
volvió a preguntase
.-¡una flor¡
se dijo
.-la más bella flor de todos los jardines
.-¿petunia lirios efímeras amapolas margaritas jazmines de oloroso perfume
y así fue pensando y pensando en la flor que regalarle deseaba
y a todas las descartaba porque ninguna podía emular ni de lejos a la belleza de su amada
pero
.-¿existirá esa belleza sin par?
se preguntó
y se dijo
.-¡no no existe¡
y entonces al decir esto si la vio
allí estaba
recogida recatada
y sin dudarlo arrancó una flor cualquiera
.-al fin y al cabo es una flor y adornará su belleza
se dijo
pero
al arrancarla la flor sangró y así ensangrentada al espectro de su amada se la entregó
y al ponerle en su grisácea calavera la flor
la calavera de su ficticia amada sangró
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