miércoles, 7 de diciembre de 2016

una tarde extraña

aquella tarde tuve
una extraña sensación
es posible que fuera como todas las tardes
.-¡es posible¡
pero notaba algo diferente
el sol de un color violeta se ocultaba tras los árboles del parque
sentado en el suelo me dispuse a pensar
intentando analizarme
.-¿el ..¿por qué tenía la sensación de extrañeza?
.-todo lo veía irreal
.-si,es cierto que la realidad está definida
que mis sentidos intentaban captarla
pero
por más que intentaba aproximarme a la realidad
esta se desvanecía como el humo
y para mi se tornaba irreal
.-la gente que por el parque paseaba tenía los ojos cerrados y las bocas muy abiertas
intenté verlos como si fuera normal tener los ojos cerrados y las bocas abiertas
me restregué los ojos para ver ala gente tal como era la gente
tranquila,conversando,paseando
pero
continuaba viendo sus ojos cerrados y sus bocas abiertas
la temperatura de la tarde también era extraña
para mi indefinible
el aire estaba quieto
ninguna palabra
ningún ruido
al no moverse el aire las nubes también estaban quietas como clavadas en el cielo
además la gente abriendo las bocas gesticulaba con cierta desesperación
.-¿seré yo también irreal?
me pregunté
pero
también cerré mis ojos abrí mi boca y empecé a gesticular
uniéndome a la irrealidad de lo real

rafael carmona jiménez
publicado a las once de la noche del día nueve del mes de diciembre
y del año 2016

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