- AQUELLA NOCHE EN DONDE LA PENUMBRA SE ESCONDE.
- BAJÉ A LOS SUBURBIOS ACUÁTICOS DE MI ALMA.
- EL CUELLO DE LA NOCHE SE RETORCÍA EN LA VENTANA.
- ¡NO TENÍA SUEÑO¡.
- LEÍA.
- CALLABA.
- LA LUZ DORMIDA DE UNA VELA ILUMINABA LA HABITACIÓN.
- ¡QUIZÁ MI ALMA ESTÁ LLENA DE HABITACIONES¡.
- ¡Y TODAS ELLAS HABITADAS¡.
- ¡POR SERES EXTRAÑOS A MÍ¡.
- EL VIENTO ULULA.
- CROAN LAS RANAS.
- LLAMAN A LA PUERTA.
- ESCUCHO UNA VOZ EXTRAÑA.
- ¡UNA VOZ DIMINUTA¡.
- QUE RECLAMA.
- QUE LLORA Y QUE CANTA.
- EN EL FONDO,ALLÍ A LO LEJOS EN UNA ESQUINA DE LA HABITACIÓN,DE UNA DE ELLAS,DE LAS QUE ESTÁN HABITADAS.
- ¡HAY UNA NIÑA¡.
- UNA NIÑA QUE NO MIRA,QUE NO OYE.
- LA LLAMO.
- ¡NO SE MUEVE¡.
- ME MIRA Y ME DICE.
- .-¡CÁLLATE QUE ESTOY LEYENDO¡.
- .-¿Y QUÉ ESTÁS LEYENDO?.
- Y LA NIÑA ME DICE.
- .-UN CUENTO DE HADAS.
- ¡AH¡...DIGO YO.
- PERO..¿TÚ CREES EN LAS HADAS?.
- RAFAEL CARMONA JIMÉNEZ.
- DÍA DIEZ Y OCHO DE JULIO DEL AÑO 2012.
- A LAS CINCO Y MEDIA DE LA TARDE.
- ESCRIBO DESDE CUALQUIER LUGAR DEL MUNDO
miércoles, 18 de julio de 2012
LA NIÑA QUE LEÍA UN CUENTO
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario