Cuando llega la oscura noche,las tinieblas encarcelan nuestros pensamientos.
cuando llega la aurora la luz del sol resplandece y huyen las pesadillas.
al atardecer,el dios Eólo estaba durmiendo la siesta bajo un sicomoro.Los vientos también se durmieron al notar que Eólo dormía.
Los hombres hartos de huracanes y de trombas.¡hartos de vientos¡ los encerraron en una jaula.
al ver a los vientos encerrados en una jaula las brisas los imitaron.¡no había ninguna brisa¡.
por lo tanto las flores no podían expandir sus olores y fragancias.
las olas no se movían.Los pájaros estaban tranquilos si ser estrellados contra las rocas por los vientos.Las hojas de los árboles no se movían.Sus ramas no se agitaban y las nubes como piedras de colores estaban quietas en el Cielo.En las cumbres de unas montañas muy altas,los hombres encarcelaron a los vientos.Despertó la Primavera y las flores no podían emanar sus olores.Pero hubo un vientecíllo de Primavera una Brisa pequeña que se escapó de la jaula.¡EL CÉFIRO¡.El Céfiro arrulló a las flores,despertó sus olores y sus colores.Los valles se inundaron de fragancias y el dios Eólo al sentir el olor de las flores liberó a los vientos de la jaula de hierro en que los habían encerrado los hombres.
¡ENTONCES SE DESATARON LOS VIENTOS Y SE CONVIRTIERON EN HURACANES.
RAFAEL CARMONA JIMÉNEZ.
DÍA UNO DE MARZO DEL AÑO 2012.
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