AGONIZABA
EL SUDOR RESBALABA
COMO PERLAS
POR SU CARA
LAS SÁBANAS BLANCAS
POR LA FIEBRE
EMPAPADAS
CON UNA SONRISA EN LOS LABIOS
CON UNA MIRADA
LO BESABA
SE IBA YENDO
SU RESPIRACIÓN SE IBA HACIENDO MÁS Y MÁS
AGITADA
ÉL LE COGIÓ LA MANO YA CASI FRÍA YERTA
PARA MIRARLA
PERO
LA MUERTE LLEGABA
SU ALMA EL CUERPO
ABANDONABA
DEJÓ DE RESPIRAR
SUS MANOS
CAYERON SOBRE LA CAMA
ÉL BESÓ SUS FRÍOS LABIOS Y LE DIJO
.-¡TE SEGUIRÉ HASTA LA MUERTE AMADA¡
RAFAEL CARMONA JIMÉNEZ
PUBLICADO A LAS ONCE DE LA NOCHE DE EL DÍA VEINTE Y TRES DE EL MES DE ENERO
Y DE EL AÑO 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario